En ocasiones cuando nos solicitan un tratamiento de blanqueamiento dental, los pacientes vienen preocupados porque tienen un diente al que le han hecho una endodoncia y está de otro color. Este suele ser el motivo de su decisión de querer someterse al tratamiento.

Si tratamos a un diente endodonciado de la misma manera que otro diente sano, puede ocurrir que estos se blanqueen y el primero no alcance el color. Se puede producir entonces un problema estético en la sonrisa.

Os estaréis preguntando entonces qué pasa con este diente. Si se puede lograr poner del mismo color que el resto. Y la respuesta es… sí. Para ello, el blanqueamiento que se aplica es lo que llamamos un “blanqueamiento dental interno”. El cual se realiza sobre las estructuras internas de la pieza, concretamente en la cámara pulpar.

Lo primero es que estos dientes que a los que se les “ha matado el nervio” tengan parte de la zona de su estructura sana; si no, habría que optar por otras opciones como la colocación de una funda o corona dental.

Una diferencia fundamental con el blanqueamiento externo, es que el interno se lleva a cabo de manera individual, frente al procedimiento mediante una férula a medida con la que se aplica el tratamiento externo.

En Herrera Briones, antes de proceder o recomendar el tratamiento adecuado realizamos un estudio previo para asegurarnos de que el paciente alcance los objetivos por los que viene a visitarnos.

Una vez decidimos que vamos a realizar este blanqueamiento interno, comenzamos a trabajar el color. A través de una escala de colores, anotamos y comprobamos que sea el adecuado. Lo registramos para que después se pueda ver la variación de los tonos.

A continuación, el doctor procede a abrir la cavidad pulpar para realizar la limpieza de los conductos del interior del diente.  Ahora se aplica por ahí el gel blanqueador, el paso anterior lo facilita. Y sobre todo es fundamental limpiar cualquier residuo dentro de la cámara antes de sellarla.

Con esta técnica, sencilla y rápida se le devuelve al diente el tono original antes de oscurecerse. Incluso se aplica en más de una ocasión si fuera necesario. Buscamos igualarlo al color del resto de piezas. Además, debes saber que ambos tratamientos, el blanqueamiento externo y el interno, pueden realizarse al mismo tiempo.

De todas formas, para ampliar más la información y resolver aquellas preguntas que aún puedas tener, te invitamos a visitarnos en nuestra clínica. Resolveremos encantados tus dudas ofreciéndote todos los detalles que necesites.